Para sistemas de gestión de filas permanentes, el poste fijo es el recurso más indicado. Mientras que el poste semi-fijo se emplea para espacios en los que se requiere la remoción ocasional o frecuente de la estructura, el poste fijo se utiliza para aplicaciones permanentes. Principalmente, este modelo es empleado en instituciones de atención al cliente.

El anclaje permanente del poste fijo se lleva a cabo por medio de una brida metálica con orificios preperforados para la inserción de pernos o tornillos que posibilitan el anclaje al suelo. De esta manera, la instalación se realiza de manera fácil y rápida. Por otra parte, el pedestal o el poste en sí se encuentra soldado a la brida, por lo que se establece una conexión sólida que no sucumbirá con el tiempo o con la presión.

El sistema de anclaje permanente del poste fijo se considera una solución ideal para todos aquellos establecimientos altamente concurridos, ya sea casinos, instituciones bancarias, taquillas de atención al público y muchas aplicaciones más, ya que aporta un mayor grado de resistencia y durabilidad, lo cual es indispensable para este tipo de entornos en los que la presión de las multitudes puede ocasionar pérdida de funcionalidad.